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NI  TODO  ES  NEGRO

NI  TODO  ES  BLANCO

 

          El origen de PODEMOS se encuentra en el manifiesto Mover ficha: convertir la indignación en cambio político, que firmaban una treintena de intelectuales.

 

          En este manifiesto se expresaba la necesidad de crear una candidatura que concurriese a las elecciones europeas de mayo de 2014, con el objetivo de oponerse a las políticas de la Unión Europea para la crisis económica.

 

          Aunque no era uno de los firmantes del manifiesto, el 14 de enero se anunció que el profesor de Ciencia Política de la UCM y analista político televisivo Pablo Iglesias encabezaría el movimiento.

 

PODEMOS se presentó oficialmente el 16 de enero de 2014.

c/ Zurita, 21, 28012, Madrid.
contacto@podemos.info

 

Para continuar con el proyecto y presentarse a las elecciones europeas de mayo de 2014, los impulsores se impusieron tres condiciones:

- - -   Recibir el apoyo de al menos 50.000 personas en la web de la formación.

- - -   Las candidaturas como el programa político del proyecto se confeccionasen mediante participación abierta.

- - -   Buscar la unidad con otros partidos y movimientos, como IU, la CUP, Partido X, el SAT, Anova o las mareas ciudadanas.

 

 

Los promotores del proyecto declararon haber obtenido las firmas en menos de 24 horas.

 

 

Creación:

 

          Es una herramienta al servicio de la ciudadanía, que tiene el objetivo del protagonismo popular y de recuperar el déficit democrático que estamos viviendo. Y así lo hemos demostrado, creando una estructura abierta, viva y cambiante, es decir, DEMOCRÁTICA y CIUDADANA donde todo el mundo pueda participar. PODEMOS no ha nacido para ser una fuerza testimonial o grupo minoritario de presión, sino que tiene que convertirse en una herramienta cada vez más fuerte al servicio de la mayoria social que quiere un cambio, si , pero un cambio que este bajo su control.


Una nueva forma de hacer política es posible, ¡PODEMOS!

 

         Apostamos por poner la política al servicio de la gente. Un país serio puede y debe auditar con todo rigor sus deudas para conocer cómo y quién las ha contraído. Tenemos que pagar lo que nos corresponda, pero no financiar con el dinero de la gente los excesos de unos pocos. Es absolutamente intolerable que el partido que gobierna un país se financie ilegalmente. La vieja política está aliada con los poderes económicos. No se trata de unas pocas ovejas negras, de casos puntuales, sino de la utilización generalizada de la representación política para mantener y repartir privilegios para unos pocos.

 

Si queremos un cambio democrático, tenemos que ser nosotros quienes lo protagonicemos.

 

La gente haciendo política para la gente.

 

JUNT@S... claro que PODEMOS

 

          Cuando los dirigentes del PP y PSOE afirman al unísono que la desafección de la gente hacia sus políticas es comprensible, pero transitoria, porque terminarán entrando en razón, no hacen sino subestimar a la gente que ha visto en PODEMOS una alternativa. Es el mayor ejemplo de su acto reflejo paternalista como casta. No pueden entender la movilización de la gente, todavía no han entendido nada.

 

PODEMOS:

Los Círculos:

 

          La Iniciativa PODEMOS ha conectado con una parte de la voluntad de cambio político generalizada, al suscitar importantes expectativas e ilusiones y cristalizar en cientos de Círculos. Estos círculos no tienen que sustituir al tejido asociativo y ciudadano existente en cada lugar. Tienen que ser permanentemente lugares de bienvenida, de suma y de extensión. Para conseguirlo debemos dejar a un lado las distinciones: todas y todos somos necesarios.

 

          Los Círculos PODEMOS están más allá de las siglas. Son espacios para terminar con el miedo, la fragmentación y la resignación, para construir la unidad popular y ciudadana, contra el empobrecimiento y el secuestro de la democracia. Desde los Círculos defendemos cuestiones de sentido común: somos ciudadanos y tenemos derecho a tener derechos; a vivir sin miedo; a la sanidad, la educación, la jubilación y la protección social; a la tierra y el territorio; al empleo; a la cultura; a desarrollarnos como personas y como pueblos; a que no nos mientan; a que no nos maltraten; a que no nos carguen con sus deudas; a que no nos roben.

 

          Somos muchos los que estamos de acuerdo en esto y en que los que nos han arrastrado hasta la difícil situación actual no nos van a sacar de ella. La sociedad ya se está esforzando y remando para salir del pozo, pero algunos no hacen ningún sacrificio y sólo empeoran dicha situación. Hay que recuperar la democracia que han secuestrado, porque el poder emana del pueblo y de la ciudadanía.

 

        PODEMOS es una iniciativa para convertir la mayoría silenciosa que está harta en una fuerza de cambio. El reto al que nos enfrentamos para que la ciudadanía recupere su futuro. Son miles de personas a las que no tenemos derecho a fallar. Para conseguirlo debemos dejar a un lado las distinciones: todas y todos somos necesarios. 

 

 

JUNT@S... CLARO QUE PODEMOS

 

 

Populistas:

 

          El populismo, se dice es - - - “presentarse a las elecciones prometiendo lo imposible a sabiendas de que es imposible”- - - . Es una definición muy interesante.

 

          En este sentido, el Frente Popular en el 36 habría sido populista: ganó las elecciones prometiendo lo imposible. Para demostrar que era imposible, algunos se movilizaron bastante y montaron una guerra civil y cuarenta años de franquismo. Y así resultó imposible.

 

          No deja de ser curioso, aunque sea anecdótico, que entre los que suelen subscribir esa definición, muchos saben de lo que hablan. Fueron ellos, precisamente, los que, de jóvenes, pidieron lo imposible siguiendo la estela del 68.

 

          El caso es que esa vía para desprestigiar a PODEMOS no les va a funcionar. Porque el diagnóstico no puede encajar peor. Ya les gustaría que fuera eso, pero no lo es. El miedo está cambiando de bando. 

 

No se puede decir que no sea un programa sensato. Hay que poner las cartas sobre la mesa:

 

¿es populismo pretender que la casta económica y política de este país tenga que cumplir la ley?

 

          En Europa estamos ahora frente al mimo problema. Pero sabemos cuál es el antídoto. No es una utopía obligar a los poderosos a cumplir la ley. A veces se consigue. Y el efecto es una bola de nieve que no se detiene.

 

En resumen, que sí se puede. Claro que se puede.

 

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